febrero-2003
Eran las dos y algunos minutos mas, y yo aun seguía despierto, apoyado sobre aquel podrido cajón, sentado en mi propia decadencia, divagando en mi infortunio, en mi soledad, en el hecho de mis acciones y mis temores conjugados con aquel orgullo que solo los fuertes lidian, en aquella noche de horrores sueltos por las calles y algunos mas encerrados en las casas, aquella noche fria, aquella del hambre, de la sed, aquella noche en que pude probar el mismo sabor de mi espina destemplada, casi congelada, con la piel pegada entre si, que no dejaba espacio ni siquiera para mi alma, aquella noche en que estaba solo, como en muchas otras, bueno, no del todo solo, pues entró como el filo de una espada de hielo por mis oídos, cortándome los nervios, y con esa voz, la voz que podría descorazonar al mas valiente de los hombres, la voz que podría en cada verso dar al mundo cuantas aflicciones inflingidas por el odio no se hayan imaginado nunca, con esa voz me dijo,-¡hazlo!, que esperas, ¡hazlo!, - al momento en que mis ojos desorbitados se encontraban con la poca esperanza y bondad en aquel cuarto, envuelta en un fuego fiero que salía de la propia oscuridad como ráfaga a través de un abismo interminable, -¡tírala!, y destruye pues la fuente de tu infame sufrimiento- era esa voz la que me pedía acabar con la propia existencia que lo mantenía en su cordura caótica la cual complementa la misma luz que con desden trataba de extinguir, no, no era mi conciencia que ya no me daba mas oportunidad y en repetidas ocasiones había tratado de acabar con mi vida, era el, aquel que por si mismo se apartaba del camino, era él, el diablo solitario como un antiguo relato al que ya nadie presta atención, pues aunque él viene a ser quien es, y a hacer lo que por otros debe, yo lo entiendo, por que quien mas le abriría las puertas a un ente solitario y carcomido, por que, él también esta solo, y yo lo acompaño como él a mi, pues yo sin él no seria quien soy, no estaría simplemente como ahora que puedo pensar que por lo menos para él existo, y él no seria nada sin mi, ya que el diablo soy yo, soy el que sufre, el que es mas mortal que inmortal, el que es mas impuro que santo, pues yo soy el mismo diablo, el mismo al que odio y que tan bien comprendo.
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hey amigo trix... me gusto mucho tus redaciiones netha me parecieron interesantees.
ResponderEliminarTe recomiendo leer un libro llamado tokio Blues para k chekes como el autor envuelve al lector..
me gusto muchooo......
saludos y buena vibraaaa
Marioasterix....
ahijo de la chingada este me gusto mucho, tengo miedo!!! XD
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