...

Y cerré los ojos para tratar de comprender al aire que pasaba entre tus labios, para saber si esa luna llega sola cuando quiere, o llega cuando mas anhela mi corazón su fulgor, me quede callado para no arruinar la noche, y los nervios transpiré, rompí, lloré, sudé y con las manos profané, no con alma, sin amor, me volví loco tratando de espantar la ansiedad, actuando al príncipe azul, siendo un casanova, y sin darme cuenta cerré el ritual, sin magia, sin huellas atravesé el umbral, y mordí los labios para no sollozar, y arranque mi piel para así evitar ese calor, mi silencio roto embauco la noche, y me ahogué sin disimulo en este cuento, de pureza y frialdad, tal como lo hiciera el monje ó el mas puro y triste tonto que sin carnalidades vive, respiré y analicé, me rebusqué en pasiones mas atroces que el común de los romances, y me encontré tan solo como ocasionalmente atrapado, reviví al alzar la vista, y lamenté en silencio, llevé la noche sin amor, mi vida sin pasión, y lo arruiné, lo arruiné. Cerré los ojos para tratar de dormitar, olvidar, parar de lloriquear, buscar amor, y lo encontré, busqué resguardo entre las alas del amor…  y ahora los nervios me dominan, me derrota el apego a sus aromas, que fantasía mas dulce en si y real que mi propia vanidad, que esplendor donde brillo mas que lo que realmente puedo complacer, cerrare los ojos esta vez, sin manos, y por principio de mi ser lo que guíe mi acto tal vez no será mi piel, ni el tiempo, por favor lo ruego… ni el tiempo debe ser, será el amor.     

Mi locura

Ya cruce mi borde, voy corriendo que te mato, ya tuve mas que antes, voy cantando lo que siento, sea la pésima especie que deplore el fino lenguaje del sabor tenue que escapa de mi lengua hacia el papel, sea la obviedad del desatino, quiero más, quiero más, fingir sangriento éxtasis entre las calles es de niños, creer de miradas y pensar amores es de extraños, ya cruce la línea mas allá de loco, lo seguro es que no vale la nostalgia, ni remuerde pecado alguno, es tan complejo que se vuelve inexplicable, ya me fui tan para adentro que a dos pasos más me salgo al universo, no me sirve la melancolía y disfruto el medio día pintando de caritas tristes la sonrisa en mis ayunos, voy mas rápido que el pestañeo intruso que me come el paso cuando miradas siguen mi espionaje entre la gente, soy mas lindo que la luna, y miro mas de frente que una bestia, sudo en llanos cuchicheos de memorias, salivo pieles entre curvas disyuntivas, me como el todo en media hora sin siquiera masticarlo, cuando noto ya acabe, y si empiezo ya no paro, soy tan reptante como amante y tan lascivo como errante, soy flameante y envejezco cuando quiero, soy creyente, soy de carne, aunque a ves me sincero, soy de palo, aunque a veces me lacero, soy viajero sin dinero, soy poeta, auque muy a mi manera, voy que vuelo para artista, ando vago, soy un loco tras la pista de esa arista, la que forma tu trasero en ángulo con la espalda baja que le solventa la caída de saliva entre mordidas, la que suele negar el proceso de estos días ya en tus tierras, esa misma que detiene el tiempo en el punto mas hirviente, lo convierte en mi locura, traza el daño sobre incauto rasgo de holocausto entre las piernas, se detiene, me devuelve la cordura, y me dice-marcha atrás-, ya sé, ya sé, que ya cruce mi borde.

Viéndote

Qué tienes que me embrujas… no eres más que perfecta cuando te veo, alma exacta, perfil callado, mirada tenue, qué miras cuando te miro… supongo que lo sabes, y lo aprovechas, supongo que me presumes tu libertad, mi cautiverio, tan adentro estoy que no me fijo en el mal tiempo, el invierno me llega y prefiero estar adentro de ti, no afuera en ese mundo que no cobija, prefiero sufrir de amor que vivir de guerras y entre políticos, prefiero tu fiel mandato a ser libre sobre una tierra carente de tu olor, prefiero estar de rodillas a tus pies que vivir enaltecido por la sombra de un santo que no probó tu piel, qué tengo yo que el mundo podría ser escaso en ofrecerte, qué tengo que decir… para ser más sincero, por que el todo no me basta, ni el océano es tan grande, el universo no es eterno, y la vida se me acaba si no me meto en ti, qué tengo que pedir, qué tengo que llevar… no es mí protección si no mí sincera rendición, qué tengo que hacer para vivir en ti, fuera de tu mundo, de mí mundo, fuera de este tiempo, para quedarme así, tu tranquila y yo mirándote, al menos de la noche a la mañana, si es que no se puede todo lo demás.

El tenerte

Debo admitir que paso los días sin inspiración alguna mas que necesidades carnales tal vez, deseos primordiales para la alimentación de este pequeño corazón, tropiezos y traviesos reclamos entre cada golpeteo que tus juegos dan a mi conversación, rechazos y heridas pequeñas que se curan con el amargo sabor de mi droga favorita que esta entre tus labios, que si antes eran sagrados, y necesitaba el valor de la misma revolución de villa para besarlos, ahora son la dosis que acompaña el dolor de extrañarte, la terrible melancolía de no tenerlos a cada momento solo se compara con la falta que también tu piel le hace a mis brazos, debo decir que si antes rezaba de rodillas en mi cama por una sola noche de estrellas y una luna celosa para los dos, ahora que pienso que es una lastima que haya pedido solo una, y no mas de un millón para llegar tan siquiera a las diez mil, tengo la cara que solo reconoce el placer de tu admiración, y las muecas que solo me hacen bello para tu voz y el calor de tus mejillas, tengo el cuerpo bien mal acostumbrado al regaño de tus manos, bien ensortijados a tu pelo están mis dedos, y el sabor de esta vida vive ahora para tu aroma, debajo de la lengua guardo sensaciones que quisiera compartir con uno que otro de tus dientes, y encima de los labios llevo costras de ese viento que te piensa todo el tiempo, ya no admiro la belleza de tus ojos, de hecho ahora les reclamo me vuelvan a ver con gran anhelo, ya no aguanto la distancia de los sueños, ni la nostalgia de los suaves pensamientos, ahora necesito de todo lo que rodea al menos tus caderas, que si no es la ropa, es la sabana que te envuelve y si no pues las cortinas de tu baño, y si es la gente pues que sea pero junto a mi, junto a mi todo cuanto te rodea, y en mi de preferencia tu, adentro, encima, por fuera, detrás o de cabeza, como tu mas lo prefieras, pero en mi, siempre en mi, con tus sabores, de los buenos, delicias y demás, a los amargos y mas rancios de cualquier recuerdo, con todos tus rencores, que importan si no han de ser para mi alma, con todas tus verdades, tus sudores; esos de preferencia ente los dedos o por debajo de mi cintura, tus olores, y tu ruido fatal, o tal vez el mas gracioso escape de viento por tu ser, todo tu ruido, el de tus nueces para nada, y el de tu silencio para devorarme, toda tu, toda en mi, solo eso pido, y debo de admitir que si antes mas soñaba, pues ahora de constantes pesadillas sufre mi recuerdo, pesadillas que me causan las nostalgia que el sueño no cura ni alimenta, nostalgia que se resuelve después de alucinarte al tenerte ya en mi vida, sin recelo me atrevo a desmentir que tu ya en mi y yo ya en ti no es tan fácil disimulo el ya tenernos, pues ahora la estrategia es no tenerte, si no que por ningún motivo te me escapes. 

Hundiros entre los colores

El estudio del color prematuramente mal versado; cuando de humo y sol cuadra el estado próximo a la escena, va en desmedro del sabor, el oído se constipa, y la vista se agudiza. No hay tal sinestesia, lo que vemos es primicia,  el alegue primordial es tan perjudicial como el juicio a simple olfato, mas, que es el nerviosismo no es noticia, se adelanta el inconcluso, y se rechazan los soberbios, se rebuscan los celosos, y el intruso se reinventa. Es la hazaña del color, labio en prosa que divulga, si es muy alto contamina, si es muy bajo disimula, si es atento mal acosa, si es tan bajo no aprovecha, si es mas nuevo es olvidado, si es vigente es de cuidado, mas la vista ofende, que del acto llena la pupila, preferible fuera que llenase los bolsillos, pero el hambre mas reclama nos llenara con pan frío,  es de muchos esperar, la suerte entre colores, es de pocos ver un mundo gris y entre tinieblas, es mas regio sonreír, conseguir la rebanada, es de nobles agachar, y agradecerse de pisadas, es de vagos marginar, la discrepancia es un desplante, lujo enfermo, desvarío, o es tan solo la tonada de los ciegos. El estudio del color va de acuerdo a los mentones, no es orgullo, ni anarquía, pero que se vaya a la chingada.

Final

Hoy tengo bastante que decir, mucha labia que soltar, ciertas cosas que extrañar, tengo huecos de sobra, y me hace falta un buen recuerdo, tengo tanto para aullar esta noche, maldita luna llena que no llega, solo cuando duermo, despierta esta ciudad, aflojo encantos en las calles, pero ni el árbol mas joven me presta atención alguna, tengo tanto que gritar, reproches, reclamos, y me he puesto a investigar; de demonios, odios y demás, tengo un adelanto, mi sueño infinito acercose al alba el día de ayer, y casi toco con mi enojo su refulgente final, refulgente, como restregándome el  anheló impropio, felicidad inalcanzable, error al querer, al buscarse mas allá de lo que en esta vida no me alcanza, tengo que temer, y tal vez hasta llorar, tengo que pensar, elaborar, sentencia elegante o muerte casual, decidir cuando la hora de la espera llega a su final es un lujo, o mas bien lastre del remordimiento, que alarga agonía sin sabor, si al menos fuera amarga, si al menos me tomara por sorpresa, pero hoy por la mañana, estaba casi preparado, deje las pieles en el piso, limpie la sangre, vertí los cantos, deje las cartas, y colgué todos los recuerdos. Tengo tanto que decir, lastima que hoy, la angustia llega a su final.

Este fuego

Al fin entendí, esto no es un cuento de hadas, no me buscas mas, no me esperas, al fin entiendo; el tiempo no es camino, tan solo es la distancia, al fin me encuentro, y de llanto hacia adentro veo lo que siempre hay, pero que nunca encuentras, veo fácil, súbito, veo divino, pero si quitases las manos de tus ojos, otro historia escribiría, hablo mucho tal vez de mas, tal vez de locos, mi refugio es tan intrascendente, tan candente, ingenuo, equivocado, tal vez entiendo, lo que viene cuando no lo quieres, y lo que buscas cuando no lo tienes, tal vez sobre surcos me desgarro, en palabras mas que nada, sin sentido, alucine, soy un loco, son los celos, la patraña, soy un tonto, al fin entiendo tantos juicios pudiera yo enmarcar en los altos de esta platónica situación, como errarlos, que seria mas obvio el no conjeturarlos, ahora creo que si bien de razones marcho en honor del sentimiento, puede ser que no sea cierto, y que me embargue de por vida el corazón, en un lamento, tengo miedo de saber si pienso lo que creo, o creo lo que siento, ahora entiendo; que prefiero hacer lamento de mis manos en el fuego, pues lo vale, y no es por mi, pero prefiero ir de apoco, calmado hacia al infierno, en vez primera de arrojar cual tierna lagrima, mi corazón hacia las brasas.   

Esta vez

Tanta palabra escrita, saliva desbordada, y aun dudas si esta boca es para ti, tanto oportunismo no es casualidad, es simplemente la búsqueda con un hambre de ti que no me deja dormir, esta vez piénsalo antes de acabar el cuento, mantengo en alto el heroísmo de estar enamorado, aunque se escurre en mis mejillas el extravío de tu cercanía, mantengo enserio la locura, y vibrante el corazón te habla, aun cuando no estas en ningún lugar, aun cuando los polos se remueven, y se pierde en vientos la esencia de tu origen, mis pies apuntan hacia la única forma en la que te ves venir,  descolgando aromas en mi piel, sacudiendo la tierra que moja mis dedos, estas vez piensa que si escribo es por que tantas cosas que se extrañan a la hora de estar junto a ti, se extrañan mas cuando no estas, dulce melancolía que me hace creer en la distancia y el tiempo, dulce llanto solitario que amenaza el reencuentro después de un desenlace amargo, tanta espera, y acostumbro al corazón a rezar lluvias sobre el calor de este anhelo, a rozar caricias entre lunas, entre estrellas, entre espacios, entre tu y yo. Esta vez piensa antes de acabar, que eres todo y mucho más por lo cual mis lágrimas escurren en  tinta, mis razones se desbocan en suspiros… mis sudores se revelan en pasiones, y mis soles sangran las mañanas, desgarrando oraciones a los vientos… trayendo de ida y vuelta esa ausencia que grita a tu piel, llevando mi aliento a tus pies, mis latidos a salpicar escarlatas sonrisas en tus mejillas, esta vez piensa en mi, que yo no tengo nada mas que decir, esta vez entra en mi, que no tengo nada mas que ocultar, esta vez reclámame si estoy perdido entre palabras, esta vez renuncia a mi, si estoy perdido entre mis lagrimas, esta vez recuérdame, si estoy perdido entre tu almohada.

El sueño parte 3

Soy del lugar perdido, del camino olvidado, blanco alivio baja hasta el centro, y en cuartas la huella crece al desafío, dejar la marca, que mas quisiera, a rastras libar néctar del afuera hacia tu adentro, a tientas cantar hondo, guiñar ojos, morder labios, me dejo, me abro, me tuerzo y del cuello provoco, un infierno se quema, ¿no me hueles en celo?, del grito me rompo, y me finjo un recluso, la piel se te ofrece y en dudas carcomes.

De yemas sinceras, tiembla de paso tan lejos como el caudal me permite, este roce divino, de calores primarios me acerco con furia, no te me alejes. De miradas profundas devoro tu alma, de calmadas sonrisas me derrito en palmadas, tacto contra tacto, nervio ensimismado, recorre los huesos destello en esencia, tu aliento jalando mi voz enloquece, rojo entre dientes, saborea de un mordisco, no me presientes, no me impacientes, me aflojo al encierro, y metes la mano, abriendo camino entre harapos flameantes, y de placer alimento; la calma en llamas, la paz en guerra, y me quedo contento, de ahí que distingo entre bellos lamentos apego a tu cuerpo, y de ahí que te miro, me pierdo, me bajo del mentón hacia el pecho, te admiro, me entierro y me encojo entre tu corazón y cuatro o tal vez cinco centímetros de tu ombligo, me estiro y retomo, camino me falta y la lluvia ya viene, me tomas dormido, desnudo te atiendo, recorro este mundo, besos, son lo sencillo, pienso extasiar mas allá de salivas, pienso llegar mas allá del motivo, recuesto en mi cuerpo tu templo soñando, me tomas de en medio y miramos tranquilos, te cuido de noche… te cuido cansado, te miro tan tibia, te siento tan dentro, te pido batallas…demando suspiros, me quedo entre sueños, me quedo despierto.

Te maldigo

Me vuelvo loco si no lloro esta noche, me pongo tieso si duermo un rato, me caigo lento y no hay nada que me pueda levantar, ahora mientes, quien lo sabe con certeza, solo se que no te creo, solo se que poco a poco se me va acabando la esperanza, poca fue la suerte de mi sangre derramada que en torrentes empapaban tus paredes, que en placeres de mi lengua desprendía, pobre de aquel que jura amor eterno cuando al frío invierno se enamora, pobre aquel que guarda en sus costillas un rencuentro adormecido, y poca honra me destrona de mi credo al decir que te maldigo por los siglos de los siglos, esperando ver tus pasos de regreso al inframundo si es que esta demanda no me escupes de regreso, si te duele mas me importa, si te importa pues me muerdes, te pido solo de regreso pegues con mas fuerza, que tu frío me ha vencido, te maldigo si te callas, me deshonro si te sigo, pero muero si te miro, si te espero me decido, si me gritas coincidimos, solamente de rodillas te lo pido tras los dientes, te maldigo si no muerdes.

Vino amargo

Vino amargo para el dulce anhelo de tu piel, sal en las heridas, agua de mar hasta en los ojos, solo de brincar el charco para ver si hay alguien de corazón mas duro del otro lado, mujer que a engaños eleva el ancla, me despegas tu del firmamento, con el filo de tu mirada viendo através de mis pestañas clavando ausencia cada vez mas hondo, tendido en la boca del lobo, temblando, sufriendo, donde esta el viento que no me toca mas la cara?, donde esta el placer de mi tacto sobre tu pelo, mi colmillo entre tus labios, mi saliva por tu cuello?, nunca sucedió en realidad, mas sentido el beso que la hiel de mis heridas nunca fue este malestar, nunca hubo lugar tras la mañana de tus piernas para este salpicar, jadear, vibrar de plenitud, nunca hubo espacio entre miradas, todo fue planeado, todo fue sumiso, de gritos para adentro, orgasmo silencioso, todo fue tan seco, tan añejo, un talento viejo que mal empleado me condujo vía tus ojos hasta el infierno de tu adentro, fue el camino que desnudo vague con desenfado feliz del sacrificio, y fue sin sangre que llego incompleto a tal castigo, fue con mieles que empecé la búsqueda, y con vino amargo entre los labios la termino.

El sueño parte 2

Nado desnudo entre tus flores, y a veces vuelvo la cabeza, de vez en cuando salgo a flote, lo bueno es que piso liviano cuando llueve adentro. Soy celoso, soy bacteria, me entretengo en tu mirada, soy de dulce y hablo mieles, soy de fuego y no me miras, toco tanto y poco agarro, rio poco y lloro mucho, soy de sangre pegajosa, eres mármol, tienes miedo, soy ceniza entre tus dedos; quisiera ser sudor entre tu cuerpo, canto bajo, desespero, tanta magia y tu sincera, yo me abro y vibro alegre, tu te cierras y fría tiemblas, de repente golpeo, azotes, me lacero, ves mi sangre y la disfrutas, me recuesto entre tus piernas; besa lento, muerde fuerte, desespero y eres hielo, canto alegre y vienes lento, pienso en verso y tu eres prosa, pasa un sueño y sigue otro, rio triste, me caliento, me suspiras; no me olvides, pasa un sueño viene otro… y me desnudo en el que sigue.

El sueño parte 1

Tuve un sueño rarísimo, fragmentado en treinta y dos noches diferentes, pero todas en común, vacías y llenas a la vez, refulgentes de vigor, y desbocadas en soledad, tuve ese presagio que retumba en el corazón y dice al alma cuando roza el fondo de su viaje mas profundo, perdí oportunidad, sufrí banalidad, y me revolqué entre la carencia, convertí la luna en carne viva, y espere que el cielo me abrazara, bajo lluvias, de salto en salto sobre cada alucinación veía venir cada vez mas próximo el fin súbito de ese sueño, la cúspide de mi éxtasis con sabor a frenesí tal vez cruel, amenazante, agridulce, pero ese sueño no cedió, y al final siempre regresé…

Solo...

Apago la luz y simplemente no te vas, cuando cierro el telón es que comienza la función, y estoy inerte, cambiante, convenzo a la razón que engaña al corazón cuando te veo y ya no estas, pierdo la cabeza y me revientan las entrañas, voy cerrando poco a poco pestaña tras pestaña, cuando el fuego me enciende vivo y grito por otra dosis de tus labios entre el balbuceo de este verbo que jamás se convirtió, que la carne no cedió, que solo el hielo aniquilo, y me pongo a resentir recuerdos contra el sueño, despertar amargo de estas manos que tan fuerte aprietan, que tanta sangre brotan de extrañar, ironía de este asunto es, que te siento sin tocar, pero es lo necio de mi tacto, o la seca soledad, que busca a ciegas solo el riego de tu voz sin nada que escuchar, voz que con palpitar siembra la razón desde el cuello hasta el labio mayor, razón de ser de esta extraña disfunción, vacío que me aflige, rareza de pasión, verdad de mi dolor, anhelo de mi errante corazón.

Ando seco

Ando seco, a punto de la desintegración total... materiales, nos vemos en el infinito donde el amor es el roce caótico de mis partículas con la materia oscura, nos vemos lejos... donde el universo canta...donde el corazón no sufre, criticad los unos a los otros, buscadse en sueños...soñad despiertos.


He aquí la materia rara que se canso de ser, he aquí que la muerte asoma el alma rota de este cuerpo flagelado en desesperaciones...he aquí que se quedan las memorias, el invierno sufrido, las primaveras mal habidas, el olvido se resbala, sonrío al no ser nada, soy libre sin desear mas que alejarme...

Soy libre por mas que doy de vueltas antes de partid, soy inerte, omnipresente en resignaciones, ambivalente en llantos, riego desamores el extraño ente que alguna fui cerca de mi cuerpo...

Saldré lejos, tal vez vuelva, tal vez sin motivos alguna vez me esperen, tal vez vuelva en vano sin que mi calma desespere, tal vez haya sido inadvertido, tal vez haya sido inútil, tal vez el universo se equivoco, yo debí haber sido cráter o un planeta...

Tal vez mas allá mi carne se envuelva en piedra...tal vez no lo sienta, y ojala no lo lamente, tal vez ya no exista, tal vez ni lo noto...

Sin tu amor

Sin tu amor seria capaz de ver el mundo diferente, tener la sensación de ser el dueño de mis fantasías, y el pleno gobernante de cualquier casualidad entre el “Tu perfecto” por debajo de la piel y mi “Yo” exacto a tu medida que se desvive por la boca gritando al viento lo que tal vez tus oídos tiemblan en temor de saber. Sin tu amor seria perfectamente capaz de vislumbrar la simple planificación del corazón y desmembrar el asunto con disimulo adecuado, sin sangrar el problema, seria totalmente vulnerable a cada tentación que desvíe mis atenciones de mis virtudes encariñadas con tus admiraciones, seria inútil en acciones, vano en mi propia filosofía, plano de humores, y seco en pasiones, seria después de todo el producto mas bajo del estado usual del miedo mas grande en nuestros corazones, seria todo aquello contrario a la sorprendente fuerza de tu mirada, al encantamiento supremo de tu calor, al universo en sueños que se desprende de tus aromas, seria sin exagerar el desamor encarnado en la ternura, la tristeza en forma de bravura, la amargura en el desden en cada fijación hacia el romance lejano de algún despertar ajeno, quedaría mi “Yo imperfecto” en nada, reducido a cero, aunque al menos seria el propio dueño de ese nada.

Contigo

No quema tanto el sol cuando de caminar hasta llegar a ti se trata, ni las penas pesan tanto si las bebo con el néctar de tus labios, no seca tanto el llanto cuando se suda antes a tu lado, tampoco se raciona el canto cuando dispongo a hacer tus ojos brillar, no se piensa en consecuencias cuando me arrimo un poco a tu calor, mas reclamo pequeñas pasiones que me hagan fiel creyente ahí en tus tierras, no se habla tanto cuando de morder labios se trata, ni se ahorra la saliva cuando de tanta cercanía a los oídos hacemos que la piel se encoja, no es demasiada la mirada que devora la dulzura de un destello segundero, ni es en vano ese esfuerzo por no pestañear para no perderse un solo segundo de un amanecer entre tus ojos, nunca es mucho tanto anhelo cuando de tus sueños se habla en recompensa, nunca es todo el poco tiempo que transcurre entre tus brazos, ni la vibra entre mi cuerpo cuando rozas con tu encanto mi piel tan de repente es tan duradera, aunque esto es bueno, pues así pido contacto mas seguido, todo es nada cuando de lejos se piensa como seria lo mas mínimo con lo tuyo tan de cerca, no se siente el aire de la misma forma, sin que rebote primero en el eco de tu voz, definitivamente no es lo mismo, no, ni se quiere igual si no es contigo.

Entre parpados cerrados

La vista activa cosas que la lengua saborea en despuntadas alucinaciones de limones agrios y grandes cucharadas de veneno amargo, se separa de los dientes y entre tierra se revuelve el gusto por el agua, se huele muerto el aroma ya caduco de cien flores marchitas, la selecta moldura de un pétalo podrido se vierte sobre el suelo como si de caricias de amoríos viejos se tratara, se toca y no se siente, mas se asemeja a algún delirio de piel acartonada deslizándose cual polvorienta ceniza sobre mármol frío y vano, se habla y no se escucha, aunque a veces se percata el ser en repentinos escalofríos de un hueco grito entre paredes, un aviso llano de una decisión fatal, se piensa y no se hace, es la acción sin su reacción, es la voz del corazón caído, que entre sollozos y tiernos arrebatos de locura se levanta hacia el distante y disimulado fin de su condena, es la ciencia de este cuerpo moribundo, de una pasión descontinuada, incapaz de revivir la mirada mas coqueta, es lo mudo de la vista cuando no se puede hallar camino mas allá de la avaricia, avaricia pura y sana, dada en confianza y renacida en el cuidado de un amor futuro, y un sueño trasnochado, es lo malo en este mundo, ver adentro y encontrar, el alma de un amante que yace muerto.

Su color

Una de la tarde, y los 35 grados centígrados a la luz dan al medio día ese color que con una mirada lleva el tiempo cincuenta años hacia atrás, el calido viento despoja las pocas hojas que no se aferran a esa casa suya que llamamos nuestra, para dejarlas a la dulce intención de iluminarlas por el sol majestuoso que se esconde tras los pequeños descuidos que la gente tiene cuando por casualidad mira las nubes, y a merced de una caprichosa fuerza de gravedad que nos hace mas ligeros al tener en mente algo mas pesado, la nariz mas obtusa puede olfatear los besos que el aire impregna el ambiente y que recibe de los árboles mas pequeños, y los grandes impacientemente asaltan la vista con palabras de historias mas viejas que su propia belleza, y el mundo se encierra en un total y único color, ella lo absorbe y salpica en brisa mi piel para hacerme notar que solo eso y nada mas me hace vibrar, su mirada, su color.

Escapo despacio

Estoy huyendo hacia adentro de tu ser, estoy cavando profundo, apuntalando desde cero, sabiendo que de un momento a otro este túnel se derrumbara soltando su peso sobre mi pecho, cubriendo de tierra una tumba mal hecha, llenando de fango esa herida tan honda. Estoy huyendo más lento, tragando mas lodo, explorando con las cuartas de mis manos a oscuras cada rincón, estoy frenando el escape, convenciendo a mi huida de quedarse a vivir, estoy seguro que si cayeran los muros, seria este sepulcro un buen lugar para morir.

Si te preguntan por mi

Si te preguntan por mí, dirás que soy una criatura, sabrán que por las noches se me antoja el tibio consuelo de una dulce mejilla irrigada por la sangre latente al compás de mis estrofas, si tal vez quisieran saber; publicaría mis anhelos, si es que pudieran entender; soltaría mi pluma sobre el mundo y tatuaría incoherencias en sus caras, si te preguntan ¿por qué?; dirás que tu eres el motivo, que a oscuras entro entre tus sueños, que dejo rastros por tus viajes, que soy un sátiro de noche y robo cada bocanada que encuentro en tu camino, desde la entrada hasta mis brazos. Si te preguntan por mi, dirás que estoy un poco loco, sabrás que tal vez voy soñando, si me preguntan por ti, diré; que también te necesito.

Playa

Con la pies llenos de arena, de frente al mar que a su gusto moja cada parte escondida de esta búsqueda entre la noche, miro de lejos; retratos a oscuras de cientos de estrellas flotando en mosaicos entrelazados a filos de espuma por encima de las olas, los pulmones abiertos filtrando la brisa, recuerdos de vientos lejanos que de día se asoman por tus jardines y recogen las risas de cada alucinación salvaje que tus pasos provocan entre las flores, con la boca entre abierta saboreo el aura de esa húmeda escena que no logra apaciguar la impaciencia que me golpea el pecho por tenerte junto, apenas puesta en un débil amarre a mis manos, exponiendo tu oportuna cercanía, a la marea mas envidiosa, jugándose las miradas entre el fino sabor a lagrimas que en el labio deja la sal, con las pupilas extasiadas, curiosas y bienaventuradas, agradezco a las horas que con el venir y escapar de un destello azulado entre el cielo y las aguas, aceleran el ritmo de esta sincronía, y congelan el miedo en audaces movimientos cuerpo a cuerpo, con los pies llenos de arena, te miro en la luna y me digo que; nunca la noche ni el mar combinaron tan bien con una fantasía, y con aliento caliente me suelto en arrebatos callados, anhelos invencibles, e ilusiones incomparables, me pregunto por dentro si este cuadro me esperara al salir a buscarte y traerte a soñar, después me pregunto el por que cada vez que despierto, entre mis sabanas hay, pequeñas conchas de mar…

En medio del camino

Voy mirando hacia el frente de mis pasos, olvido mi camino y no hay sendero, solo marca el tiempo un horizonte que juega de día y noche entre lagrimas de felices ratos y otros mas amargos, manda a la torpeza de mis movimientos solo este magnetismo que tan cerca me retiene, manipula entre mis dedos ilusiones descosidas que se unen a una fina pared de terciopelo, la boca no resiste, y se abre sin dejar pasar mas que suspiros hondos que revientan miles de sabores sobre la ausencia que me arrebata el pensamiento, pensamiento que me dice que sigo vivo, dividido a la mitad de un sueño, un murmullo, y cien maneras de verte sin tenerte, voy mirando solo en este rumbo una luz que me dice que ando fuera, fuera de este mundo que me ata a despertar de mi mas esperado sentimiento, y me safo de algún modo la piel para seguir en medio de tus ojos, para vivir flotando entre tus labios y el espacio que me dice que aun estoy en esta tierra, que me dice que aun no llego, pero que ando cerca.

Solo tù

Hoy te vi, tan azul, como el inicio mas triunfal de mi melodía mas audaz, con el paso mas veloz, que tus ganas de venir, el desgarro mas sutil, a la hora de fingir, fingir que ya te vas, indiferente la señas de este rechazo, fingir que soy tal vez aquella solitaria estrella que habita sola en tus moradas, sabiendo que es tan falso, sabiendo que allí adentro somos mas que yo, durmiendo boca abajo, con mi viento atosigando, somos dos adonde entro, caminando y tan nervioso, somos dos, cuando me topo con que adentro se te ve igual que afuera, cuando encuentro que no sales de ti misma, y se que eres anormal, pues no hay abismo en tus entrañas, que se cierran para ti y solo tú, y se abren tan casuales cuando vengo de morir, que se hacen tan angostas cuando adentro somos dos. Hoy te vi, tan resguardada y atrevida, contrastante, y sin medidas, cuando solo te marcaba mi presencia ya en tus pies, cuando sola, me tenias, y no mirabas mas que a ti.

Me ha pasado

He empezado a buscar donde guardar el corazón. He rayado mi piel, y llorado hasta que esa luz se cae, no he tratado de estar aun de pie, solamente me dejo caer, con el hambre de ver si aun estoy junto a mí, he salido a buscar ojos así, he tenido que ahogar serenidades que no me van, siempre tratando de no volver a ver, calmar esta precoz aprehensión hacia tu piel, y no puedo seguir, no con la cara levantada, por que estando agachado y desnudo frente a ti, es como me siento bien, solo envuelto entre murmullos que me encierran mas y mas, y no quiero salir. He empezado a temer de tu calor, he pensado que aquí llego el final, y me dejo quemar dentro de ti, me dejo dormir entre tu inquietas practicas de obviedad, dejo de ver tan hacia fuera, para quedarme largo rato en ti, dejo caer la angustia, y esa ropa que me pesa, y me hundo en tu interior. He soñado que esto ya pasó, lo he soñado…

sin titulo

Pudiera gritar yo tu nombre tan oníricamente, que solo el eco lo escuchara, pudiera verter esa gota tan cínicamente, que solo el suelo lo notara, pudiera sangrarme el consuelo tan súbitamente, que solo mi piel lo agradeciera, pudiera besarte tan trágicamente, que solo mi néctar buscaras, pudiera tomarte tan sutilmente, que tu piel solo extrañara la mía, pudiera llorarte tan tácitamente, que solo tus ojos me callaran, pudiera quererte tan gentilmente, si solo lo hiciera al tenerte de frente.

Maldita sea

Maldita sea otra vez la pésima suerte que a los amantes de abiertas venas nos provoca el veneno de esa vuelta tajante al olvido de una noche sin acompañante, maldita sea de nuevo la espera larga y tan fría que me tienta a gritarte de espaldas, tomarte del pecho y besarte tan fuerte como para sacar el aliento y dejarte marchita, dejarte tan fría que tu ser no despegues de mi pulso vacilante, de mi pasión tan austera, y de mi desesperación tan humillante, maldita sean las noches tan prosperas en luces de ensueño si no te tengo a mi lado, si no conjuro, ni mi fuego alzo tan alto para quemarte la tez y provocarte sudar, hacerte temblar, y desfallecer frente a mi, maldita sea esta labia que deja entrever mi entrelinea imperfecta, mi lado perverso, y mi absurda necesidad, maldita sea la vez que supe que estas líneas era inaplicables, la vez que supe que no era el verdugo, si no el mártir, de esta casualidad tan rebuscada, de esta proclamación tan sórdida, y tan ilusionada, maldita sea la ora en cuenta me di de todo lo que hacia y de cómo el amor me lo torcía.

Todo lo que quiero

Ahora después de tanto tiempo tengo miedo, de ver cuando es que el resultado de la espera vale la pena, de si ese rayo te pega igual que a mí, de si por casualidad la ficción de este cuento de hadas guíe tus pensamientos hacia alguien que quisiera ser encantador de los cuatro vientos solo para llevar el cargado recuerdo de tantas noches en guardia por tu sueños, quisiera volverme una palabra al encuentro de tus labios con mis oídos, me hubiera gustado no ser el niño que sigo siendo, para volverme una tibia melodía corriendo entre cada capa de tu imaginación, paseando por tus venas, y saliendo bajo la sombra de tus pestañas, desearía ser el cielo y el horizonte, la tierra y cada piedra debajo de tus pies, solo para que tus ojos no se aparten de mi. Pero bueno, me conformo por ahora siendo aquel que a oscuras se esconde detrás de los árboles de esas fantasías tuyas, en las cuales irrumpo como ladrón durante la noche, por ahora entro a escondidas en tus sueños, y solo así soy todo lo que ves, lo que sueñas, y respiras, lo que hueles, y lo que sientes, lo que mas quiero, eso soy, dentro de un sueño.

En tus sueños

Ahora busco en el cielo con mas ansias de mirar mi propio reflejo encantado, encantado por el dulce calor de tus ojos pasando a través de mi pecho hasta mi corazón, la certera pregunta que tus labios avientan sobre mi asombro de niño inquieto y nervioso, la obstinación de tu piel por mantenerse tan tibia y cercana a la mía. Desenmaraño las estrellas buscando una deseo olvidado por ti, probando pociones y recetas mágicas, conjurando nombres de constelaciones, y acarreando mi luna hasta tu ventana, solo para asegurar mi lugar debajo de tus pies mientras te elevas hacia una bóveda nocturna a la cual no pertenezco, a la cual cuesta trabajo pasar si no es de la mano de una de sus estrellas, pero de todas formas busco y no dejo de intentar coser mis fantasías a tu vestido de noche, pues tal ves siendo optimista me podrás tomar y ponerme dentro, después de todo no cuesta nada soñar, cuesta mucho buscar, pero todo lo vale un lugar para mirar mas de cerca esa razón por la cual me desvivo en alcanzar el muy arriba, para mirar mas de cerca lo que quiero ver de ti.

Viento

Siento que las sombras hablan através de un fino susurro de imaginación, siento que el viento golpea mi corazón tan repetidas veces como lo haces tu con esos ojos, siento que me toma y me detiene sobre el recuerdo de tus manos cerca de la desesperada explosión entre mi piel, siento que las ilusiones las separa y las convierte, las convierte en una extraña publicación de miedo a través de mi sudor, siento que el viento se lleva lo poco que me queda, me azota contra el suelo y me baja de las nubes, siento que se lleva al sur, muy al sur la gotas de nostalgia, mas al sur donde el aire se detiene, donde se vuelve una sutil pero empalagosa respuesta a tu anhelo de frío, donde las corrientes se pasean solo alrededor de su destino, siento estar seguro de que sepas por el viento el color que escurre por las paredes que ahora se derriten, el tiempo que transcurre desde la primera luz através de mis ojos hasta la ultima del día, siento que sabes lo que pasa fuera de esta tierra desolada y seca, que sabes lo que anima a esta llamarada que de pequeña pasa a minima, y que se pierde entre la noche, La noche que saboreas dentro de sueños, sueños que platican y confiesan al aire que te llega, al aire que te observa, al aire que me lleva, siento como viajo sin cansar las ansias, sin agotar reservas, ni perder la prisa, siento como llego y me detengo, como bajo asta las huellas, de esa viva melancolía, como las sigo paso a paso, y me devuelvo hasta dar cien vueltas, siento como sientes, siento con el aire que esta hueco esta mas lleno.