jueves, 19 de agosto de 2010
Vino amargo
Vino amargo para el dulce anhelo de tu piel, sal en las heridas, agua de mar hasta en los ojos, solo de brincar el charco para ver si hay alguien de corazón mas duro del otro lado, mujer que a engaños eleva el ancla, me despegas tu del firmamento, con el filo de tu mirada viendo através de mis pestañas clavando ausencia cada vez mas hondo, tendido en la boca del lobo, temblando, sufriendo, donde esta el viento que no me toca mas la cara?, donde esta el placer de mi tacto sobre tu pelo, mi colmillo entre tus labios, mi saliva por tu cuello?, nunca sucedió en realidad, mas sentido el beso que la hiel de mis heridas nunca fue este malestar, nunca hubo lugar tras la mañana de tus piernas para este salpicar, jadear, vibrar de plenitud, nunca hubo espacio entre miradas, todo fue planeado, todo fue sumiso, de gritos para adentro, orgasmo silencioso, todo fue tan seco, tan añejo, un talento viejo que mal empleado me condujo vía tus ojos hasta el infierno de tu adentro, fue el camino que desnudo vague con desenfado feliz del sacrificio, y fue sin sangre que llego incompleto a tal castigo, fue con mieles que empecé la búsqueda, y con vino amargo entre los labios la termino.
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